ESDLA. Los Anillos de Poder T1. (I) El Canon
Pues aquí tenemos la primera temporada de Los Anillos de Poder en Amazon Prime, una serie centrada, teóricamente, en los sucesos acaecidos al principio de la Segunda Edad del Sol, y que, si se acaban consumando las 5 temporadas previstas, llegará hasta el inicio de la trilogía original de El Señor de los Anillos.
LOS ANILLOS DE PODER Y EL LIO MONTADO
En este post voy a centrarme en el tema de la adaptación y el canon, las excesivas, y en algunos casos, inmerecidas críticas, y en exponer mis razones para considerar que Los Anillos de Poder es una adaptación muy conseguida (presupuesto millonario mediante), teniendo en cuenta los escollos a los que se enfrentaba como son los derechos literarios adquiridos y la complejidad de su adaptación.
En otro post analizaré los fallos de estructura y guión de la serie, que los hay y muchos, sin tener en cuenta el trasfondo de la historia.
Y también habrá que hablar de los aciertos de guión que también los ha habido.
Vamos al turrón…
DERECHOS DE LAS PUBLICACIONES
El primer punto que se debe tratar es el del alcance de los derechos de publicación adquiridos por Amazon para Los Anillos de Poder.
Christopher Tolkien sacó a subasta ÚNICAMENTE los Apéndices de El Señor de los Anillos.
Estamos hablando de un libro escrito con posterioridad a la trilogía original, y en la que Tolkien introdujo nombres, fechas y acontecimientos para hacer más comprensible y fijar a los personajes y eventos aparecidos.
Los Apéndices es un libro que no llega a las 200 páginas y tiene 6 apéndices (A-F), donde se detallan la genealogía de los reyes de los hombres desde Númenor, pasando por Gondor, Andor y Rohan, así como los enanos del linaje de Durin.
Otro apéndice es un calendario que relata los principales acontecimientos desde el establecimiento de la Segunda Edad hasta más allá del final de la Tercera Edad, cuando termina El Señor de los Anillos.
La parte específica de la Segunda Edad apenas son 3 páginas …
Los otros apéndices, se recrean en las genealogías de los hobbits, un calendario de la Comarca y una guía sobre escritura y ortografía de las diferentes lenguas habladas en la Tierra Media.
Para redondear el tema, en el contrato de venta de derechos, había dos cláusulas que impedían a los guionistas utilizar y nombrar a los hobbits y a Gandalf.
¿HABÍA MIMBRES PARA LOS ANILLOS DE PODER?
Es una buena pregunta, con el material referido a la Segunda Edad, y constreñidos a no salirse de ese libro, la verdad es que no. Había dos caminos a mi entender: Contar una historia muy lineal donde los personajes apenas duran unos minutos en pantalla y son reemplazados por otros nuevos, o usar a los personajes y algunos eventos de los Apéndices y moldearlos para una historia más visual y con personajes de más recorrido.
Esta última opción es la lógica y la elegida por Amazon ¿Errónea? Creo que no, pero es evidente que esa opción choca (y de qué manera), con la pretensión de muchos fans de ofrecer un producto más canónico con los libros.
HABLEMOS DEL SILMARILLION
Lo ideal para la recreación de una época tan fascinante como la Primera o la Segunda Edad del Sol, hubiera sido acudir a adaptar el Silmarillion pero concurren varios factores. Por un lado, la familia Tolkien se negaba a vender los derechos, y, por otro lado, cualquiera que haya leído el Silmarillion sabe que es un libro inadaptable a cualquier medio visual.
El Silmarillion: Casi 500 páginas de relato continuo, sin diálogos entre personajes más allá de alguna frase suelta. No voy a poner pegas al libro porque disfruté y he disfrutado su lectura y vastedad de datos que contiene, pero es como tratar de condensar en 500 páginas, la historia de Europa desde los antiguos griegos hasta el final de la SGM. La cantidad de personajes, lugares y acontecimientos sería tan abrumadora que un evento o personaje apenas duraría un par de páginas antes de desaparecer de la historia y ser sustituido por otro.
Exactamente igual sucede con el Silmarillion y su adaptación a la pantalla. Un lector lo tiene más fácil, pero encauzar una historia como esta en la pantalla, donde en un episodio van a aparecer 10 o 12 personajes principales y eventos espectaculares, para en el siguiente episodio ser sustituidos, para siempre, por sus hijos, o los que traicionaron a los primeros, es un suicido, aparte de que sólo los fans muy puristas podrían aceptarlo. Nos guste o no, las adaptaciones de libros o comics en la gran pantalla se hacen para llegar al máximo número de espectadores, y tenemos que ser conscientes de ello.
LICENCIAS AL ADAPTAR LOS ANILLOS DE PODER
El camino tomado por los guionistas para desarrollar los Anillos de Poder implica utilizar una serie de personajes (si son conocidos por el gran público mejor), y hacer su historia alrededor de ellos, tomando eventos y reinterpretándolos.
Por supuesto, estas licencias hacen arrugar una ceja cuanto menos a cualquier lector y amante de la obra de Tolkien. Aparecen personajes fuera de época, conocen a otros que no deberían conocer, se establecen relaciones inexistentes, se ofrecen explicaciones inventadas para justificar este u otro evento futuro, etc.
¿Tenemos que tragar con ello? Puede parecer duro, pero la respuesta es Si. No vamos a ver la traslación de la historia de los libros a la pantalla sino su reinterpretación, pero si lo que cuenta la historia tiene cierta coherencia, amplia el universo y acerca la magnífica obra de Tolkien a las nuevas generaciones, creo que será un buen logro.
UN INCISO A CUENTA DE LA SERIE FUNDACIÓN
Este inciso que parece fuera de lugar, viene porque en mi post sobre la primera temporada de Fundación, que quejé amargamente de como habían trastornado la historia original. ¿Lo que me parecía mal entonces ahora me parece bien? No. Entiendo que deben haber licencias creativas al trasladar una obra literaria al medio audiovisual, pero en Fundación, la productora tenía los derechos de la obra de Asimov. Es decir, tenía un margen enorme para utilizar todos los personajes y situaciones de la obra, pero en su lugar optaron por dejarla irreconocible.
En los Anillos de Poder, vuelvo a ser pesado, sólo tenían los derechos de la trilogía de El Señor de los Anillos y los Apéndices. Una trilogía brillantemente llevada por Jackson y que dejaba poco espacio para ser excesivamente canónico con una obra que, además Tolkien desarrolló poquísimo, dejando mucho margen para improvisar.
ESTO LO HEMOS VISTO ANTES
Se que puede parecer una justificación a las licencias tomadas por los guionistas, pero hay multitud de ejemplos de licencias que chocan con los libros y la magnífica trilogía de Peter Jackson contiene una cuantas. Se que son elementos que interfieren poco con la adaptación casi literal de los libros, pero ahí están.
Tenemos, por un lado, la eliminación de la historia de Tom Bombadil (vale, muy aburrida pero capital para muchos fans), la muy alargada historia de Arwen, Legolas y sus acrobacias imposibles con toques humorísticos, la omisión de Saruman arrasando la Comarca y Sam dirigiendo la defensa, cambiando el final del maligno mago.
PD. Christopher Lee, amigo personal de Tolkien, se enfadó mucho con Jackson por este cambio. Vale, esta parte es de lo peor de la trilogía y veo un acierto que Jackson no lo incluyera.
Jackson también elimina las continuas canciones y poemas que podrían lastrar las películas.
Los elfos de Lothlorien apareciendo en el Abismo de Helm para hacer más épica la batalla.
Pero, sobre todo, los personajes están más “humanizados”. Tolkien no entraba en la psique de sus personajes, simplemente los definía con unos atributos morales de banco y negro.
Pasadas unas décadas, es imperativo desarrollar unos personajes algo planos y más en el cine. Sí, son cambios mínimos y a todos los efectos mantienen el espíritu de los libros, pero están todos hechos para adaptar la obra de Tolkien a la narrativa visual, y acertaron.
En los Anillos de Poder ocurre algo parecido, con el problema añadido del poco margen de maniobra que tenían los guionistas y que no tuvo Jackson.
PRINCIPALES CRÍTICAS
Ya he hablado de las incongruencias de personajes, hechos o contemporaneidad, y sabemos que algunos de ellos no son nada canónicos con las obras, pero vuelvo al tema de los parámetros estrechos con que trabajaban los guionistas.
Se que, para muchos, esto sólo es motivo para despreciar la serie, pero cualquier acercamiento al magnífico universo de la Tierra Media dentro de unos límites razonables, y que podamos verlos en pantalla con este despliegue de dinero en efectos especiales y vestuario, debe alegrarnos.
A partir de este momento se van a producir spoilers de hechos acaecidos en los libros que puede que acaben apareciendo tal cual en las sucesivas temporadas o simplemente sugeridos para encajar con la historia.
COLOR DE PIEL Y TAL
Un clásico de esta época cuando aparecen personajes de otras etnias y que parecen no casar con el imaginario.
Empecemos por los Pelosos. En el prólogo de La Compañía del Anillo, se menciona a los Pelosos como una de las ramas de los hobbits, y de ellos dice Tolkien que tienen la piel más oscura. Así que no debe haber ningún problema.
El otro punto de desencuentro es el de Arondir, el elfo de las tierras del Sur, interpretado por un actor de ascendencia puertorriqueña. Volvemos a la mismo. Tolkien habla de diferentes razas de elfos y en ningún lugar especifica que son blancos y de pelo largo y rubio. De hecho, rizando el rizo con Galadriel de la que más tarde hablaremos), en el Silmarillion se destaca que era admirada por su largo cabello dorado. Vamos, que el pelo rubio no era un standard élfico al uso.
Disa, la esposa enana de Durin IV y Miriel, la reina regente de Numenor también son de tez oscura, y por supuesto el punto donde pivotar la tan manida y cansina idea de dar protagonismo a otras razas.
El debate es tan estéril que lo cierro aquí.
GALADRIEL LA INTENSITA
Los Anillos de Poder nos muestra a una “joven” Galadriel al final de la Primera Edad del Sol y comienzo de la Segunda. Las críticas van por mostrarnos a una elfa guerrera (que raro ¿no?) en vez de la serena Galadriel de Guerra del Anillo.
Por otro lado, que siempre pone cara de enfurruñada, que va de sobrada con todo el mundo y que es muy orgullosa y prepotente.
Por partes: El propio Tolkien el el Silmarillion describe a Galadriel con estas palabras:
Pero Galadriel, la única mujer de los Noldor que se mantuvo erguida y valerosa entre los príncipes contendientes estaba ansiosa por partir. No pronunció ningún juramento, pero las palabras de Fëanor sobre la Tierra Media le habían ardido en el corazón, y anhelaba ver las amplias tierras sin custodia y gobernar allí un reino a su propia voluntad.
Esto viene a colación de que Galadriel fue una de los noldor que vivian en Valinor y se rebelaron contra los Valar (los dioses, por así decirlo) al querer perseguir a Morgoth hasta la Tierra media tras robar los Silmarils. Esta ansia les llevó a robar los barcos de sus hermanos Teleri. Fue el primer caso de guerra entre elfos.
Los Valar les prohibieron a estos rebeldes, incluida Galadriel, el poder retornar a Valinor como el resto de los elfos, por su sublevación. Y, de hecho, arrastran una maldición a partir de entonces.
Al final de la primera Edad, y como premio por luchar contra Morgoth, los valar perdonaron a Galadriel y le permitieron volver a Valinor, pero lo rechazo “por orgullo” (según palabras de Tolkien).
Ya vemos que en los libros se describe algunas de las características que se critican al personaje de los Anillos de Poder: Ambición, orgullo y soberbia.
Además, el propio Silmarillion destaca como Galadriel va teniendo un papel más sereno en el transcurso de su larga vida, y sobre todo al alcanzar su reinado en Lórien y la posesión de Nenya, uno de los 3 míticos anillos élficos.
El querer ver reflejada en esta Galadriel, la interpretada magníficamente por Cate Blanchett es un error. Si tenemos en cuenta que pasan más de 3000 años hasta llegar a encontrarse con Frodo, no es justo con la evolución de un personaje que aquí estamos viendo como una jovencita, orgullosa y consentida, pero una jovencita para los parámetros élficos.
Sobre el tema de sus habilidades guerreras, el cargarse a un troll de las nieves sin despeinarse y sus piruetas a caballo, pues la verdad, venimos de ver a Legolas haciendo cosas más sonrojantes y Galadriel era una noldor, lo mejor de la raza élfica en todos los sentidos. Estamos ante una de los últimos noldorin que existía en la Tierra Media en la Tercer Edad y que había vivido su infancia en Valinor, visto la luz de los árboles. Ningún elfo vivo podía decir lo mismo. También era nieta de reyes con lo que defectos de carácter podían ser más acusados si cabe.
PD1. De acuerdo, por muy noldor que sea, el tratar de volver a nado desde la entrada de Valinor es una sobrada de los guionistas.
DISCREPANCIAS ARGUMENTALES
Vamos a enumerar algunas discrepancias que para alguien que ha leído el Silmarillion rechinan bastante:
Galadriel vive en Lindon, pero para entonces ya estaba casada con Celeborn que, de momento no aparece, y había tenido a su hija Celebrían (futura esposa de Elrond y madre de Arwen).
Aunque los elfos se relacionaban con los hombres de Númenor, no consta que Galadriel fuera allí y mucho menos en el plan que va.
Finrod, el hermano de Galadriel tiene bastante peso en el Silmarillion. Funda el reino de Nargothrond en la Primera Edad y lucha en las guerras de Beleriand mostradas en el prólogo, pero no muere a manos de Sauron aunque es hecho prisionero por él. En este punto, el odio y el rencor de Galadriel por vengar a su hermano (siendo uno de los motores de la serie), está fuera de canon.
La expedición de Númenor a la Tierra Media sólo tiene razón de ser bajo unas circunstancias que no se han dado del todo y esa subtrama está claramente montada para ofrecer la dosis de acción necesaria.
El enfoque de toda la historia de Númenor si aparece apoyado por los pilares fundamentales de esta subtrama. Otra cosa es si acaba yendo por el camino canónico o estará frenado por los temas de derechos.
Elendil tiene dos hijos: Isildur que vemos en la serie, y Anarion. No tiene ninguna hija. Es curioso que se hayan dejado a Anarion que es pieza fundamental cuando llegan a la Tierra Media. La fundación del reino de Gondor junto a su hermano, y las ciudades de Osgiliath y Minas Tirith son claves en la Tercera Edad. Aparte, junto a Isildur, es uno de los Argonath, las magníficas estatuas talladas en el rio Anduin, que vimos en la primera película de El señor de los Anillos.
La trama de Elrond y Durin IV puede que sea la más próxima a la trilogía de Jackson. La localización del mithril y lo que va a suponer para la forja con Celebrimbor a la cabeza, parecen bien establecidas, y como en el caso de la trama de Númenor, hará falta saber si puede continuar de manera canónica o no.
La creación de mithril es totalmente inventada. Tolkien no lo detalla en su obra, y a mí, particularmente, me parece una buena leyenda.
Los Pelosos son canónicos, aunque su forma de vida difiere bastante de lo relatado por Tolkien. Aquí los vemos como nómadas y Tolkien los describe como sedentarios y con el hábito de vivir en cuevas y túneles. Vamos, lo contrario.
De los personajes inventados como Halbrand, Arondir o Adar, no hablamos porque son eso, inventados y recursos para hacer avanzar la historia por otras tramas indirectas.
También hay puntos insinuados que pueden desarrollarse de manera más canónica con el transcurso de las temporadas.
DESCANONIZANDO LOS ANILLOS DE PODER
Lo que enumero en el anterior punto, son patadas al canon pero, llegado al caso, asumibles. El problema viene en los dos últimos episodios donde creo que se les va la mano.
EPISODIOS 7 y 8, EL CANON VA POR EL AIRE
Galadriel dice que “perdió” a su marido Celeborn en la guerra… vale. Esta si me parece una fuerte patada al canon y lo único que lo explica es que “reaparezca” en alguna temporada. Está bastante cogido con pinzas tratándose de un personaje muy importante. Me dejó bastante descolocado.
También en la trama de Durin, vemos que ¿el mithril cura la decadencia de los elfos? ¿Nos muestran al Balrog? ¿Durin IV es desheredado? ¿Su mujer se pone a conspirar para recuperar el poder? Con lo bien que iba esta trama, y la han dejado en suspense de una manera bastante mala. Espero que no saquen al Balrog destruyendo Khazad-Dum. Teniendo en cuenta que pasa varios miles de años después y el tema conspiranoico y de heredades enaniles … no sé. Cierto que el papel de los enanos en la Segunda Edad es inexistente, pero esto …
La trama de Numenor con un “volveré” a lo McArthur por parte de la reina tampoco es coherente con el canon, aunque, curiosamente, es la historia cuyo trasfondo e hilos que deja la serie, permiten ver una historia algo más cercana al canon.
Lo de dirigirse los refugiados a Pelargir está difícil porque se supone que se funda 1500 años después de la forja de los anillos… Veremos.
Finalmente, la conversión de las Tierras del Sur en Mordor … lógicamente no es canon, pero tampoco recuerdo en el Silmarillion que Sauron se encuentra esa tierra ya yerma o se arruina por su presencia (entiendo que más lo segundo).
NOTA: Lo del cartelito de ”MORDOR”, no tiene perdón.
LLEGAMOS AL EPISODIO 8 Y LA FORJA DE LOS ANILLOS
En la Segunda Edad hay dos hechos muy destacables, y uno de ellos es la forja de los anillos. En este episodio asistimos a la forja de los anillos élficos por parte de Celebrimbor ayudado por Halbrand (jeje).
Sólo vemos la forja de los 3 anillos de los elfos, pero se forjan, a la vez, los 7 anillos para los enanos y los 9 para los hombres, forjando luego Sauron el anillo único para controlarlos. El caso es que este proceso donde Sauron, haciéndose pasar por Annatar, ayuda a los herreros elfos, duran 100 años y aquí parece bastante corto. Cierto que 100 años, teniendo en cuenta que es humano y no elfo, hubiera cantado mucho, no hubiera pasado nada por sacar a Sauron llevándose el resto de anillos de poder.
La otra incógnita de la temporada se centra Los Pelosos y el Extraño. El capítulo comienza en todo lo altos con las tres sacerdotisas surgidas de nadie sabe dónde, tomándolo por Sauron y descubriendo que no es quien creen, sino “ese” Istari. ¿Se supone que Gandalf y no puede ni debe ser nombrado? Parecería que sí aparte de una frase que dice a Nori y que el Gandalf de Jackson repite a Merry en Moria.
Problema importante: Los Istari (Gandalf, Saruman, Radagast y los dos magos azules), APARECEN EN LA TERCERA EDAD, NO EN LA SEGUNDA.
Está claro que es un recurso y un personaje que deben promocionar para atrapar a quien haya visto las películas de Jackson, pero no tiene el mínimo sentido.
PARA TERMINAR, ¿SON RELEVANTES LOS CAMBIOS DEL CANON?
Hasta el sexto episodio, no le di mucha importancia a los cambios, pero en los dos últimos, aunque dejan un buen final de temporada, para cualquiera que haya leído los libros, deja un sabor amargo ciertas licencias de guión.
Aun así, en esta primera temporada de los Anillos de Poder, hay la suficiente esencia de la historia y guiños de acontecimientos para que un lector de la obra de Tolkien puede reconocer y, guste o no, apreciarlos.
¿La historia debería ser más fiel? Si, rotundamente. Pero hablamos de un libro que tiene sólo tres páginas de unos hechos que abarcan más de 3000 años. Fuera de esos hechos puntuales el campo para improvisar de los guionistas es enorme, y lo han aprovechado para bien y para mal.
Evidentemente, uno de los pilares fundamentales como es la forja de los Anillos de Poder, tiene su enjundia, pero creo que costaba poco hacerlo algo más canónico sin quitarle épica y enlazarlo con el engaño de Sauron que ha reflejado bien la serie.
Molesto con este punto y un par más, pero en líneas generales, satisfecho con esta temporada que nos vuelve a acercar a la Tierra Media