Spiderlight, Adrian Tchaikovsky. Entre la sátira y el drama
Cualquiera que haya jugado una partida de rol en su vida va a encontrarse cómodo con la idea principal de Spiderlight de Adrian Tchaikovsky. Vamos a encontrarnos con el grupo clásico de héroes realizando una misión épica para derrotar el mal.
Tenemos al paladín guerrero, al mago taciturno, la sacerdotisa santurrona, la exploradora experta en armas y al pequeño ladrón bribonzuelo. Un grupo de manual y perfectamente equilibrado salido de cualquier partida de Dungeons&Dragons.
INTRODUCCIÓN
El canon casi podemos decir que termina ahí, porque a partir de esta premisa, Tchaikovsky se encarga de explorar y retorcer el género, ahondando en la humanidad de los personajes y mostrándonos su lado más oscuro y mortal, por así decirlo.
Pero no contento con ello, introduce un elemento irónico en todo el viaje de los héroes, con situaciones repetidas docenas de veces en libros e incluso en partidas, pero profundizando el lado absurdo y trastocando el final preconcebido por el lector cuando ve algún pasaje familiar.
Pero la puntilla en Spiderlight es, sin duda, la incorporación en el grupo de un elemento del lado Oscuro para ayudarlo a derrotar al mal, en este caso una araña gigante transformada mágicamente en un mezcla entre humano y araña.
Y aquí es donde el relato da el click necesario para dar la vuelta y tocar temas poco o nada vistos en el género de las novelas de espada y brujería.
UNA HISTORIA DIFERENTE
Spiderlight comienza desde la visión por parte de las arañas, del ataque del grupo antes mencionado para proveerse de cierta clase de amuleto y una petición basada en el chantaje emocional a la reina de la arañas para que uno de sus miembros pase a formar parte del grupo y así hacer que se cumple la sempiterna profecía para acabar con el Mal.
Aquí ya vemos la primera “contradicción”, el ataque contra las arañas es violento y destructivo a mas no poder y el autor, al mostrarlo desde la óptica contrarias a la usual, hace que empecemos desde las primeras páginas a no ver la cruzada del Bien tan de color blanco impoluto.
Los miembros del grupo no tienen reparos en utilizar sus artes mágicas y marciales para masacrar a los enemigos sin el menor atisbo de piedad, sólo basándose en su concepción moral de que el Bien siempre debe estar por encima del Mal.
La conversión de la araña en una especie de híbrido de humano y araña para facilitar su integración en el grupo, no hace sino, despertar los prejuicios de los miembros del grupo, al considerarlo una criatura del Mal sin ningún derecho.
Aunque la conversión haya dotado a la araña de habla y sus comentarios y reproches a la actitud del grupo sean entre mordaces y claramente reprobables.
A partir de aquí, y en continuo viaje hasta alcanzar las tierra dominadas por el señor Oscuro, se van sucediendo una serie de etapas y encuentros que van a enfatizar la actitud xenófoba de casi todo el grupo y la simpatía del lector hacia Enth, la araña transformada que irá poniendo en tela de juicio los motivos nobles de la misión y soportando los ataques y amenazas de sus propios compañeros.
TAMBIEN HAY ESPACIO PARA EL HUMOR
Aunque pueda parecer hasta ahora que Spiderlight es una novela reflexiva sobre la verdadera naturaleza del Bien y del Mal (que también), está trufada de elementos humorísticos, tocando los clichés tradicionales del género, llevándolos al absurdo y a que veamos con cierto espíritu crítico los estereotipos y situaciones ya vistos en cualquier otra obra del género.
Evidentemente, Tchaikovsky no es Terry Pratchett y su humor simple, directo y bastante fino no lo vamos a encontrar aquí, pero si que los puntos de humor que aparecen están muy bien puestos y sirven para un desahogo de la trama principal.
PERSONAJES
El grupo de héroes en Spiderlight, es como decíamos, el clásico en cualquier partida de rol.
Comandados por Dion, la joven sacerdotisa que según avanza la misión empieza a replantearse su capacidad para ser merecedora de las bendiciones de su Dios.
Cyrene, la exploradora que quiere dejar de ser una mera mujer objeto y que la vean los hombres como mujer fácil.
Harathes, el paladín fanático y sobreprotector de Cyrene que la considera como de su propiedad.
Lief, el ladrón que podría ser de inicio el menos virtuoso del grupo pero que es el primero en empatizar con Enth y ver la parte humana que hay en su interior, siendo, a la larga, el más moral del grupo.
Y finalmente, Penthos, el mago muy pagado de sí mismo que sólo busca la mínima excusa para empezar a lanzar bolas de fuego, y que, enamorado de Dion, trata permanentemente de destacar ente sus ojos.
Como vemos, todos los personajes parten de un rol centrado en el lado de la Luz y el Bien, pero el desarrollo de la aventura, y sobre todo la presencia de Enth, hace que ellos vean las debilidades y oscuridades tanto del resto del grupo como las propias, terminando en un claro ambiente de derrotismo.
CONCLUSIÓN
Spiderlight hay que tomarla por lo que creo que es, una sátira de las novelas de espada y brujería, pero con un trasfondo dramático, más actual y que hace que veamos a los personajes en el reflejo del día a día.
Rascando la superficie de cualquier persona o situación, encontraremos un poso de algo contrario a nuestra primera apreciación, ya sea positiva como negativa.
Aparte vamos a ver acción, peleas en tabernas, enfrentamientos encarnizados, humor incluso en estas situaciones y un final bastante bien redondeado, coherente y lógico.
Una novela entretenida, con su dosis de aventura rolera para enganchar al jugador/lector empedernido. Pero que se atreve a dar un paso más allá y ofrecer cierto toque reivindicativo con una mezcla bien dosificada de sátira y drama.
Adrian Tchaikovky se aventura también en la ciencia ficción con trilogía tales como Herederos del Tiempo o incluso con una fusión entre ambos géneros como Linaje Ancestral, una obra corta totalmente recomendable.